Meditación del papa Francisco
“Nos puede pasar lo mismo que le pasó a Juan Diego: mirar a la Madre desde nuestros dolores, miedos,desesperaciones, tristezas, y decirle: Madre, ¿qué puedo aportar yo si no soy un letrado?’. Miramos a la madre con ojos que dicen: son tantas las situaciones que nos quitan la fuerza, que hacen sentir que no hay espacio para la esperanza, para el cambio, para la transformación. Y en silencio, y en este estar
mirándola, escuchar una vez más que nos vuelve a decir: «¿Qué hay, hijo mío, el más pequeño?, ¿Qué entristece tu corazón?, ¿Acaso no estoy yo aquí, que soy tu madre no dejes vencer por tus dolores y tristezas», nos dice.
Hoy nuevamente nos vuelve a enviar, como a Juanito; hoy nuevamente nos vuelve a decir, sé mi embajador, sé mi enviado a construir tantos y nuevos santuarios, acompañar tantas vidas, consolar tantas lágrimas, compartiendo la alegría de saber que no estamos solos, que ella va con nosotros”.
S.S. Francisco
Reflexión
Después de escuchar la Palabra de Dios y el texto del Papa, reflexionamos en silencio o en comunidad, preguntándonos: ¿Qué me sugiere Dios para mi vida? ¿Qué nos sugiere Dios para nuestras vidas?
Petición
Virgen de Guadalupe, cubre con tu manto a todos los países de nuestro continente, especialmente a aquellos que experimentan dificultades políticas,económicas, sociales o sanitarias.
Con María, roguemos al Señor Escúchanos, Señor, te rogamos.
Busquemos a otros y hagámonos cargo de la realidad que nos
corresponde sin miedo al dolor o a la impotencia, porque allí está todo
lo bueno que Dios ha sembrado en el corazón del ser humano.
Fratelli Tutti, 78
Meditación del papa Francisco
“[María] es la amiga siempre atenta para que no falte el vino en nuestras vidas. Ella es la del corazón abierto por la espada, que comprende todas las penas. Como madre de todos, es signo de esperanza para los pueblos que sufren dolores de parto hasta que brote la justicia. Ella es la misionera que se acerca a nosotros para acompañarnos por la vida, abriendo los corazones a la fe con su cariño materno.
Como una verdadera madre, ella camina con nosotros, lucha con nosotros, y derrama incesantemente la cercanía del amor de Dios.
A través de las distintas advocaciones marianas, ligadas generalmente a los santuarios, comparte las historias de cada pueblo que ha recibido el Evangelio, y entra a formar parte de su identidad histórica.... Es allí, en los santuarios, donde puede percibirse cómo
María reúne a su alrededor a los hijos que peregrinan con mucho esfuerzo para mirarla y dejarse mirar por ella. Allí encuentran la fuerza de Dios para sobrellevar los sufrimientos y cansancios de la vida”.
S.S. Francisco
Reflexión
Después de escuchar la Palabra de Dios y el texto del Papa, reflexionamos en silencio o en comunidad, preguntándonos: ¿Qué me sugiere Dios para mi vida?
¿Qué nos sugiere Dios para nuestras vidas? Petición Esperanza de nuestros pueblos, derrama una vez más la cercanía del amor de Dios sobre todas las personas del mundo que no conocen a tu Hijo, sobre
los que experimentan crisis de fe, o sobre los que caminan sin esperanza.
Con María, roguemos al Señor Escúchanos, Señor, te rogamos.
Un pueblo vivo, dinámico y con futuro es el que está abierto
permanentemente a nuevas síntesis, incorporando al diferente. No lo
hace negándose a sí mismo, pero sí con la disposición a ser movilizado,cuestionado, ampliado, enriquecido por otros.
Fratelli Tutti, 160
Meditación del papa Francisco
“Desde sus entrañas [María] aprendió a escuchar el latir del corazón de su Hijo y eso le enseñó, a lo largo de toda su vida, a descubrir el palpitar de Dios en la historia.
Aprendió a ser madre y, en ese aprendizaje, le regaló a Jesús la hermosa experiencia de saberse Hijo. En María, el Verbo Eterno no sólo se hizo carne, sino que aprendió a reconocer la ternura maternal de Dios.
Con María, el Niño-Dios aprendió a escuchar los anhelos, las angustias, los gozos y las esperanzas del Pueblo de la promesa.
Con una mirada atenta, sabe custodiar la vida y la misión de su Hijo y, por tanto, de todo lo amado por Él. Ella se ha acercado en las situaciones más diversas para sembrar esperanza. Acompañó las cru-
ces cargadas en el silencio del corazón de sus hijos.
Tantas devociones, tantos santuarios y capillas en los lugares más recónditos, tantas imágenes esparcidas por las casas, nos recuerdan esta gran verdad”.
S.S. Francisco
Reflexión
Después de escuchar la Palabra de Dios y el texto del Papa, reflexionamos en silencio o en comunidad, preguntándonos: ¿Qué me sugiere Dios para mi vida? ¿Qué nos sugiere Dios para nuestras vidas?
Petición
En la fiesta de tu concepción inmaculada y en el último día de la celebración del Mes, te consagramos,Madre, nuestra vida. Haznos santuarios vivos y así custodia una vez más los gozos, los dolores, los anhelos y esperanzas del pueblo de Dios.
Con María, roguemos al Señor Escúchanos, Señor, te rogamos.
Todos los creyentes necesitamos reconocer esto: lo primero es el
amor, lo que nunca debe estar en riesgo es el amor, el mayor peligro
es no amar.
Fratelli Tutti,